La obra de Vincent van Gogh (1853 - 1890), pintor postimpresionista neerlandés, está impregnada de una belleza emotiva y se caracteriza por el uso de colores llamativos. Pintaba de manera desenfrenada, con pinceladas caóticas y libres, y llegó a producir más de 2.000 obras en tan solo una década. En los años previos a su trágico suicidio, van Gogh vivió en el sur de Francia y fue hospitalizado en varias ocasiones por los trastornos mentales que padecía. Aquí fue donde creó sus obras más célebres: La noche estrellada y Los girasoles, entre otras. Prácticamente desconocido en vida, su cuñada publicó sus cartas de manera póstuma, hecho que despertó la fascinación del público por su obra.